domingo, 3 de enero de 2016

Cómo enfrentar a la temida Vieja Velociraptor y no morir en el intento.

Por Diego Auger

Esta entrada podría considerarse una continuación a la Enciclopedia de la Fauna Chilena que estoy construyendo, más aún, creo que es pertinente hablar en extenso de este personaje en particular. Bienvenido sea usted, querido lector, al primer capítulo del año, el que será completamente dedicado a las Viejas Velociraptor.

¿Qué es una Vieja Velociraptor?


Quiero partir aclarando que la Vieja Velociraptor, es mucho más que un personaje, me refiero a que hoy en día esta señora representa un concepto, y si me apuran, un estilo de vida. 
La Velociraptor, adopta su nombre por la rapidez con que corre por alcanzar un asiento desocupado en el metro, la que se asemeja al método de persecución de los viejos animalitos prehistóricos sobre sus presas.

Me explico, este espécimen transgrede toda norma etaria, sexual y socioeconómica. Lo que transforma a una persona en una Velociraptor es la actitud que tiene frente al mundo, yo lo llamo "Rencor Universal". Es esa sed de venganza, de generar justicia por tus propias manos y devolver el karma acumulado a través de los años, y qué mejor manera de hacerlo que haciendo un poco más incómoda la existencia del resto de los mortales. 
Siguiendo esa lógica, no es descabellado decir que todos estamos irremediablemente destinados a convertirnos en una Velociraptor en algún momento.
Existe un período en la vida de las mujeres, en donde no se sabe si es joven o anciana. La velociraptor frecuentemente corresponde a ese rango de edad, probablemente entre los 35 y 50 años.

Viejas Velociraptor, orígenes:


Recuerdo algunos momentos de mi infancia, estimo que entre los 4 y los 6 años. Y así como todas las tardes mis vecinitos me llamaban para salir a jugar, la hora de entrarse era dada por el paqueo de la vieja de mierda que se ponía a mojar la calle y a nosotros. Esta vieja es considerada también la sapa por excelencia de la cuadra, nada escapa a sus dotes detectivescos tipo CNI. Los tiene a todos identificados.

Hay un evento que llega a mi memoria frecuentemente, es probable que fuera unos días después de navidad, tenía una bicicleta nueva y necesitaba estrenarla. Ahí estábamos, mi inocencia sobre dos ruedas versus la eñora esta y su manguera, batalla de titanes. Tristemente no resulté vencedor aquel día, por evitar ser víctima del agua sucia que nos arrojaba giré bruscamente en dirección a un perro, frené estúpidamente solo con la rueda delantera y me dí una vuelta digna de Tomás Gónzalez haciendo gimnasia, aún conservo esa cicatriz en el hombro por el asfalto y en mi espalda por la bicicleta sobre mi frágil cuerpo. Desde ese día hasta que me cambié de casa hubo una guerra constante entre los niños del pasaje y esa señora, mala volá.
Estas personas tienen la esencia de la Velociraptor en su frío corazón, estas personas son el origen de las Velociraptor, las Velociraptor originales, sin lugar a dudas.

Velociraptors en el trome:


Años viajando en el metro todos los días, siempre en hora punta. Después de haber vivido en el infierno hecho transporte público, después de perder la dignidad con los roces inevitables y de sufrir con los olores de dudosa reputación de los cerdos culiaos la gente, me siento capacitado para hablar de las Velociraptor del Metro y cómo lidiar con ellas.

Como dije anteriormente, el origen etimológico de nuestras enemigas está en su manera de acechar y atacar un asiento vacío y su similitud al depredador de Jurasic Park.

Hace un par de días ocurrió el fenómeno de navidad, yo tuve un stand en una feria navideña en un sector popular de Santiago, por lo que debí ir todos los días al Barrio Meiggs para abastecerme de mercadería para la noche, es increíblemente desagradable toparse con ellas en esas fechas por una serie de razones, las cuales todas están conectadas entre sí:

1. Grandes Bultos: Meiggs es el lugar de compras tanto para la señora que le compra los juguetes al broca cochi como para la que va a hacer negocios. De cualquier manera cuando salen de ahí, lo hacen con una cantidad considerable de bolsas repletas, incomodidad para todo aquel que la rodea en el querido vagón.

Metro desde Baquedano hacia abajo
2. Sudor: Estás pegado a la puerta del tren, nadie baja, solo sientes que cada vez hay más gente y la señora frente a ti está más cerca tuyo. Cuando pensabas que nada te podía incomodar más que el juguete de la bolsa de la señora en tu entrepierna, comienzas a sentir un hedor extraño, una suave brisa que no deleita precisamente tu nariz, sumado al calor y a la falta de ventilación, combinación terrible. Hay gente que no se ducha, está claro, pero no puedo crucificar a alguien por oler mal después de las caminatas eternas que se dan bajo el sol en los barrios comerciales. Aguantarse hasta que te toque bajar y debas luchar para salir es la única opción válida.

Woody con progeria
Descansa en pez
3. Odio Generalizado: Al principio del blog presenté la idea del "Rencor Universal" como motor de odio hacia el resto de los mortales. La vieja no encontró el regalo que le pidió el cabro chico al viejo pascuero, le lleva la versión pirata y sabe que no le gustará el "Space Boys 3", pero lo lleva igual. Ya viene furiosa porque tuvo que pelear con otra de su especie para poder comprar el último calendario de Felipito Camiroaga y perdió. ¿Con quién se desquita? Con el primer joven que vea sentado en el metro. Ocurre algo que se denomina "Ataraxia Negativa", según la escuela filosófica varía el significado, me quedo con Epicuro, quien describe la Ataraxia como la ausencia de perturbaciones, el placer espiritual más elevado, el paso anterior a la felicidad. Ataraxia Negativa, por consecuencia sería todo lo contrario, ya me entienden. Por lo que la Velociraptor debe aplicar todas sus tácticas aprendidas desde que usa el transporte público, bolsas kamikaze, insultos varios y alusiones a la "juventuh de hoy en día, por dioh santoh". En el metro y en el amor todo se vale, no se da por vencida hasta que alguien se aburre y le cede el asiento de mala gana para que  ella celebre en silencio su victoria, no sin antes dar un sermón de buenas costumbres (fuck logic).

Me va a dar un soponcio
4. Paranoia: Para quienes estamos acostumbrados a transitar por los barrios comerciales no es sorpresa encontrarnos con los típicos lanzas, he sido víctima y no ando llorando por las calles. Sin embargo, estas señoras se sienten el centro del universo y creen que todo aquel que la mira más de medio segundo la asaltará, situación que se agrava si es que tu no eres precisamente blanco y rubio. Puede que esté bien cagado de plata, pero eñora, no le voy a andar robando el juguete del cabro chico, el calendario de felipito y las chalas Zico, osea jelou.
Mil likes para este luchador de la vida
Pienso en esto que llamo "Paranoia Racial" y se me viene a la mente inmediatamente el incidente heroico del que fue partícipe hace un par de días el Senador Espina. Aparentemente él frustró un portonazo del que sería víctima, según sus palabras "Uno de los que detuve tenía un arma bastante grande, pero los enfrenté y uno de ellos se me escapó. Detuve a uno y dijo que estaba haciendo deporte" (Fuente: Publimetro)
Me conmueve el sentido de la justicia que tiene este sinvergüenza noble trabajador público, sin duda un ejemplo a seguir en sus casas. Ahora, cada vez que veamos un rotito caminando fuera de tu hogar, acechando a tu familia, detengámoslo, acabemos con la delincuencia, pues hombre. Un chiste, a lo menos. Entonces esto abre paso a una interrogante mucho muy importante: ¿Es el Senador Espina una Velociraptor? La respuesta está dentro de nuestros corazones, depende de ti encontrarla.

Es hora de combatir. ¿Qué hago?:

  • Evadir sus ataques: Esta vieja está armada, las bolsas y los codos funcionan para ella mejor que las cuchillas y las pistolas para los flaites. Cuídate de no salir lastimado en el intento y podrás disfrutar un buen viaje.
  • Piensa como Velociraptor: Cuando se abran las puertas del vagón, tienes que estar muy atento. La premisa aquí es detectar a la Velociraptor antes que ella te vea a ti, anticípate a sus pasos. Lo que nos lleva al último paso para conseguir la victoria frente a nuestro enemigo.
  • Se una Velociraptor: Suena terrible. Tristemente es verdad. La manera más efectiva de ganarle a una vieja de estas, es ser una versión propia de Velociraptor. Sentarte en el asiento desocupado, evitando que sea ocupado por alguien que no lo necesite. No importa si alguien viene cansado, tu estás ahí. Las viejas arderán en la rabia viéndote sentado en ese lugar y vociferarán hasta el cansancio, eso solo alimentará tus ganas de seguir cómodo. Pero llega el momento de volver a ser humano, alguien realmente necesita sentarse, ya sea una embarazada, un discapacitado o una abuelita, le das el asiento y sabes que hiciste tu buena acción del día. El mundo vuelve a su curso normal, y la Vieja Velociraptor no se pudo sentar en tu puesto. Ha vencido el bien.  


Así concluyo el primer blog del 2016, muchas gracias a quienes leyeron esto y a los que leyeron el capítulo anterior. Espero subir el siguiente pronto, un besito.

martes, 22 de diciembre de 2015

Enciclopedia de la fauna criolla, parte uno.

Por Diego Auger
Antes de todo, gracias por comenzar a leer mi primera entrada en el blog. Un besito para ti.

(Las opiniones vertidas en este blog son completa responsabilidad mía, de repente me da la wea y puteo a todo el mundo, nada personal)

Llega el tan ansiado fin de año, la navidad, los regalos, los abrazos cuando llegan las doce, Macaulay Culkin en la tele, "jo-jo-jo", el cola 'e mono y un sinnúmero de gringuerías que parecen sorprendernos cada año. 

En cierto momento de la noche, próximo a éstas fechas, es cuando las conversaciones se tornan melancólicas, los temas son acerca de cosas ocurridas dentro de éstos 365 días, se habla sobre los lugares nuevos, experiencias vividas y personas conocidas, allí es donde radica el tema que trataré el día de hoy.


Especímenes humanos en Chile (Tomo 1)


Simios promedio

Es bien sabido que la fauna humana en nuestro queridísimo país evoluciona constantemente, ya sea producto de la influencia de los avances de la tecnología, de los medios de comunicación, o tal vez porque la gente es hueona nada más y sigue a las masas cual rebaño de corderos.

A lo largo de este año he creado un listado con una serie de estereotipos contemporáneos, símil a una pokedex (el número tal vez sea tanto como los pokemones) pero en Chilito.



1. El Zorrón Perrito Papurri Papá Odioso:

¡Tranquilo papá!

Hace un par de semanas una amiga me dió el dato de una pega, el casino Enjoy buscaba a los jóvenes más "prendidos" para participar como anfitriones en las fiestas que realiza este casino durante el verano. No fue sorpresa para mí el no ser llamado, pero hubo algo que me llamó la atención de todo, la gente que resultó clasificada era idéntica una de la otra. A riesgo de sonar resentido (quizá lo soy un poco), los tipos que fueron escogidos como los más prendidos eran todos cuicos, un abc1 promedio. ¿Coincidencia? No lo creo.

Basado en hechos tristemente reales.
Hagamos un ejercicio, viajemos mentalmente desde tu casa ubicada en un sector periférico de la capital hacia un lugar un poco más acomodado, busca una casa bien grande, con piscina. Hay una fiesta ahí, una pequeña parrillada, las tsiquillas con sus bikinis, los machos alfa jugando con su balón de rugby, ¿agradable no? 
Esta escena veraniega probablemente sea la idónea para describir a este especimen. Ingeco (ingeniería comercial) en universidad zorrona promedio, pantalones dockers, iphone 6 y el autito del papá forman parte del pack inicial de estos individuos. 

Por supuesto, mi personalidad no me permite tenerle mala onda a alguien sólo por su apariencia (excepciones siempre hay) o porque tenga más plata que yo (triste realidad), sin embargo hay un momento en donde alguno de estos personajes abre la boca y se oyen unas frases realmente para el oro, tenga el favor de pensar en alguien con la papa en la boca cuando lea lo siguiente: 

- "Lo más lejos que he llegado en Santiago ha sido metro Escuela Militar."
- "Oye, tengo que ir a metro El Golf. ¿Las micros llegan hasta allá? ¿Será muy peligroso?
- "Una vez vi el cerro Santa Lucía, creo que queda camino a la playa."
- "Los pobres son pobres porque quieren." (Si hay algo que hace arder mi resentido y comunacho corazón, es esto)
(Frases extraídas de conversaciones escuchadas por este autor y amigos varios)

Anoche un amigo, con experiencia en una universidad en donde abunda la zorronería por las cercanías de San Carlos de Apoquindo, me comentó el caso de los "Pote Lovers". Todos sabemos que estudiar en la universidad implica grandes gastos de dinero y cuando las 32 lucas de la junaeb no apañan, hay que utilizar la vieja técnica de llevar comida en un termo o, en su defecto, un pote. Parece que eso les parece gracioso a los intento de Chicago boys y deben andar publicando en las típicas páginas de confesiones y "lo escuché en" que la chanería invade los espacios que solían ser exclusivos de ellos. Detestables, a lo menos.


2. El Flaite: 


Del Flaite choro al Fashion moderno

Todos sabemos a qué nos referimos cuando decimos la palabra "Flaite", aunque de por sí, tiene una amplia gama de significados. Para ayudarnos un poco, Wikipedia tiene una definición más o menos decente:

"El término flaite es un vulgarismo chileno que, sería equivalente a otros como cumapungaladrónpoca clasebajorascarotopicantemalandro, etc. En un sentido estricto, este término se utilizaría para denominar a personas de malas costumbres, pertenecientes al lumpen que presentan atributos vulgares y socialmente inadaptados, y en un sentido extenso, para referirse a este tipo de comportamiento en general, independientemente del origen social de la persona" (Wikipedia, 2015)

A tono con "The Force Awakens"

Para mí, el verdadero flaite, es el flaite de antaño. Aquel que te daba miedo de solo verlo, ese loco era choro weon. Usaba camisas de samurai, escuchaba cumbia (Amar Azul, Damas Gratis, Los Pibes Chorros y cosas por el estilo), andaba con el cuchillo carnicero para todas partes, se juntaba en la esquina con los cabros de la pobla para deleitar su paladar con Dorada (un manjars, más vieja escuela que la Báltica) y va a alentar a su equipo todos los fin de semana a la barra. Estos flaites podían ser los más delincuentes de la población, pero cuidaban a sus vecinos, entraba alguien a robar en la casa de la vecina y llegaban todos estos weones con las hechizas. ¡Ellos comenzaron las detenciones ciudadanas, cabros! ¡Que se sepa! 
Yo no soy flaite, soy fashion
Los verdaderos guardianes

Hoy los flaites escuchan reggeatón, usan ropa de marca (la mayoría de las veces falsas), infaltable las tillas Jordan, cejas delineadas. Es más, creo que no tengo que explicar muy profundamente como es el flaite contemporáneo, lo vemos a diario en todas partes. (Ver imagen a la derecha).


Usa la fuerza, joven padawan!
Si tuviera que escoger una versión de flaite en particular, me quedo con los flaites a la vieja usanza. Pero no todo está perdido señores, aún podemos encontrarlos en las poblas, y por sobre todo, en los estadios a la hora de causar desmanes. 
El día del partido de la última fecha del torneo de apertura tuve sentimientos encontrados, tristeza por una parte, al ver a tanto simio peleando sin motivo, y alegría de encontrar por fin a mis amigos flaites choros después de tanto tiempo. Choros, los extrañamos.


¡Posición ilícita!
No podría haberlo dicho mejor




Con esto culmina el primer tomo de la Enciclopedia de la Fauna Criolla, muchas gracias por leer hasta el final, espero que haya sido de su agrado. 
Más adelante continuaré con el resto de los personajes que se pueden encontrar en nuestro país. Por lo pronto, los dejo con un temita ad hok a los flaites choros, un besito a cada uno de ustedes. 





Yerba Brava, La Cumbia de los Trapos